Cada año, durante Semana Santa, miles de personas realizan una de las peregrinaciones más emblemáticas del país. La de ir a visitar al Señor Caído en el municipio de Girardota.
La tradición no se pierde y los devotos del Señor Caído, el Jueves Santos emprenden su travesía sin importar el clima y el cansancio. Muchos se van descalzos, de rodillas y hasta en sillas de ruedas, como muestra de su fe para evocar algún milagro o agradecer por otros recibido.
Esta tradición que está arraigada a la fe católica, atrae a creyentes de distintas partes del país que desafían todo tipo de adversidades y emprenden el viaje desde distancias lejanas que pueden tardar hasta más de tres horas.
La iglesia en Girardota se abre desde las 4:00 a. m. para que las personas puedan ingresar a darle gracias a Cristo o a descansar del largo recorrido y tomar fuerzas para el regreso a sus hogares.
La imagen del Señor Caído es tan famosa que incluso, extranjeros la visitan anualmente para pedir milagros y pagar sus promesas.
Muchos fieles participan también de la procesión del Viacrucis, que generalmente comienza en la fábrica de Enka y finaliza en el parque principal.
Además, en la Semana Santa en el municipio se realiza una de las mayores ventas de figuras religiosas.
