Esta es la historia del municipio de Antioquia que fue destruido por terremotos

Foto tomada de El Tiempo

31 años han pasado desde que dos fuertes sismos sacudieron a los habitantes de Murindò, un municipio del Urabá antioqueño.

A las 4:32 a. m. del 17 de octubre de 1992, Murindò fue prácticamente destruido por un sismo de magnitud 6.6 que tumbó sin piedad las casas y otras construcciones como el Palacio Municipal, la iglesia, el hospital local, entre otras.

Cuando se creyó que había pasado lo peor, al día siguiente, el 18 de octubre, otro sismo, pero esta vez de magnitud 7.1, terminó de arrasar con lo poco que había quedado en pie.

Los movimientos telúricos dejaron 7 personas fallecidas y otras 20 heridas, causaron también la destrucción del 95% del área urbana del municipio, por lo cual, la comunidad tuvo que ser trasladada por las autoridades departamentales a un campamento a orillas del río Atrato.

Sin embargo, aunque el traslado era de forma temporal, hasta la fecha los murindoseños aùn permanecen allì con fuertes problemas como las inundaciones que se presentan cada vez que crece el rìo Atrato.

Aunque en la Asamblea de Antioquia se aprobó la Ordenanza 03 del 16 de marzo de 2018, donde se ordena la reubicación de la cabecera municipal a un paraje llamado Los Playones, en el sitio no se ha iniciado con ninguna construcción para que los pobladores tengan una vida digna.

Consecuencias del fenómeno natural

De acuerdo con el Servicio Geológico Colombiano (SGC), uno de los efectos que dejó el desastre fue el surgimiento de una pequeña isla de 150 metros de largo por 50 de ancho, debido al levantamiento del fondo marino.

La isla está ubicada en el corregimiento de Damaquiel, en el municipio San Juan de Urabà.

Además, por la ruralidad de la zona se generaron varios deslizamientos que provocaron el represamiento de varias quebradas del río Atrato lo cual afectó a otros municipios cercanos.