
A nivel departamental, una de las obras más destacadas es el terminal marítimo, proyectado para transformar al Urabá antioqueño en el puerto más moderno del país. Aunque las obras principales avanzan a buen ritmo, el proyecto sigue enfrentando un complejo conflicto administrativo y jurídico surgido el año pasado debido a la instalación de sus dos últimas torres de energía.
En el camino hacia el mar, otra obra fundamental es el Túnel del Toyo. Aunque el tubo principal de este megacomplejo vial ya está casi terminado, su finalización aún depende de un tramo vial a cargo de la Nación, el cual quedó estancado bajo el actual gobierno nacional, que lo consideró fuera de sus prioridades presupuestales.
Aunque la Gobernación ya asumió un primer contrato para ese tramo y liberó recursos para reactivar las obras y se espera que este año se aclare la situación presupuestal a nivel nacional, además, se espera que la Alcaldía de Medellín también pueda habilitar recursos para esta obra que conectaría las autopistas Mar 1 y Mar 2, y no termine convertida en un elefante blanco.
Por su parte, Medellín se proyecta para la culminación de dos obras que habrían quedado inconclusas en el gobierno pasado, por un lado se encuentra la recuperación de la Biblioteca España, que abrirá tras una década de cierre y por el otro, está el despliegue de las obras de Parques del Río Norte que busca convertirse en la especialidad pública más importante del norte de la ciudad.
Además, el inicio de operaciones de Puerto Antioquia, ubicado al sur de Bahía Colombia en el municipio de Turbo, será un hito en la infraestructura del departamento. Con una inversión superior a los 770 millones de dólares y una concesión de 30 años, el puerto contará con 1.340 metros de línea de muelle y un calado de 16,5 metros, lo que permitirá recibir buques Postpanamax capaces de mover 14.000 contenedores.
Por otro lado, este año será la puesta en operación de la autopista Magdalena 2 (Remedios – Maceo – Puerto Berrío), un avance significativo en la infraestructura de Antioquia. Esta nueva vía completará el mapa 4G en la región y redireccionará el tráfico vehicular hacia el Bajo Cauca, evitando el paso por el Norte y ofreciendo una ruta más directa por el Nordeste.
Finalmente, se espera que en el tercer trimestre del año se paga en servicio el intercambio vial del aeropuerto de Rionegro, que conectaría el Túnel de Oriente con el José María Córdova. Este proyecto conjunto entre la Gobernación y la Concesión Túnel Aburrá Oriente es una pieza clave para la movilidad al Oriente y tiene una inversión superior a los $100.000 millones.