Daniela Cortés, enfermera del Hospital La Merced, fue agredida físicamente por la madre de un menor al que le realizaba un procedimiento de canalización. El niño lloró y, como reacción, la mujer le propinó golpes y arañazos en el rostro a la profesional.
Cortés manifestó sentirse “humillada y pisoteada” tras la agresión. En sus declaraciones, lamentó que cumplir con su deber y procurar el bienestar de un menor desencadenara tal nivel de violencia.
“No es justo que por cumplir con nuestra labor y querer que un menor mejore su estado de salud, tengamos que pasar por situaciones como esta”, expresó, asegurando que no respondió a la agresión por respeto a la institución en la que trabaja.
Pronunciamiento del hospital
A través de un comunicado, el Hospital La Merced rechazó enfáticamente lo ocurrido, señalando que este tipo de ataques son una ofensa directa contra todo el personal que dedica su vida al cuidado de los demás.
“La agresión hacia nuestra profesional no es solo un hecho aislado: es una afrenta a todos quienes trabajan por el bienestar común”, señaló la institución, invitando a la comunidad a reflexionar sobre el respeto al cuerpo médico y asistencial.
La enfermera fue valorada médicamente y presentó la respectiva denuncia.
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