Antioquia ya cuenta con la Ruta del Guaro, una propuesta cultural que invita a recorrer lugares emblemáticos del departamento para entender el aguardiente antioqueño como símbolo de encuentro, memoria y celebración, más allá de la bebida. La iniciativa arranca con dos paradas cargadas de historia y tradición: el Salón Málaga, en Medellín, y el restaurante La Gloria de Gloria, en Envigado.
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El Salón Málaga, fundado en 1957, es uno de los espacios más representativos de la vida nocturna y cultural de Medellín. Entre tangos, boleros y música tropical, este lugar ha sido durante décadas un punto de reunión donde el tiempo parece detenerse. Allí, el ritual de sentarse a conversar y compartir un aguardiente hace parte de una forma pausada y respetuosa de celebrar, en la que distintas generaciones se encuentran alrededor de la música y la palabra.
La segunda parada es La Gloria de Gloria, un restaurante ubicado en el barrio Los Naranjos de Envigado, reconocido por su cocina tradicional y por ser un punto de encuentro cotidiano para familias y amigos. Con más de 30 años de historia, este lugar se ha consolidado como referente de la gastronomía popular del sur del Valle de Aburrá. Aquí, el aguardiente aparece como un acompañante natural de la mesa compartida, la conversación larga y las celebraciones sencillas que nacen desde lo cotidiano.
La Ruta del Guaro propone mirar el aguardiente como un elemento cultural que ha estado presente en fiestas, reuniones familiares y momentos importantes de la vida paisa. El recorrido resalta la identidad, la memoria y la tradición, y promueve una celebración consciente y responsable, poniendo en valor los espacios y las personas que han mantenido viva esta herencia en Antioquia.
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