
El aumento en el costo de vida hace que vivir en Medellín sea más difícil que en la capital
Vivir en Medellín se ha convertido en un desafío económico cada vez más evidente. Mientras en otras ciudades del país la preocupación por el costo de vida tiene un peso del 1% al 5%, en Medellín la cifra asciende al 15,7%, según la más reciente encuesta de Invamer, lo que la posiciona como la ciudad donde más ciudadanos consideran que su economía se ha visto afectada por el incremento en precios de vivienda, alimentación, transporte y otros gastos básicos.
A pesar de que Bogotá suele ser catalogada como la ciudad más costosa del país, la diferencia entre ambas capitales muestra una realidad distinta. En la capital, solo el 1,5% de los encuestados considera el costo de vida como su principal preocupación, una cifra que es considerablemente menor a la registrada en Medellín, incluso, según datos de Numbeo, vivir en Medellín es hoy un 5,3% más caro que hacerlo en Bogotá.

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Preocupan los arriendos y el costo de la canasta familiar
Uno de los principales factores que ha disparado la preocupación por el costo de vida en Medellín es el valor de los arriendos. De acuerdo con Numbeo, los precios en la capital antioqueña pueden ser hasta 7,4% más altos que en Bogotá, por ejemplo, el alquiler de un apartamento de tres habitaciones fuera del centro de Medellín ronda los $2,83 millones, mientras que en Bogotá es de $2,64 millones y en el caso de un inmueble de una habitación, el precio promedio en Medellín es de $1,45 millones, mientras que en la capital del país se encuentra en $1,30 millones.
Además, la demanda de renta turística en sectores como El Poblado, Laureles, Buenos Aires y La Candelaria ha disparado aún más los precios, reduciendo la oferta de vivienda para los residentes permanentes. Según Ciencuadras, las publicaciones de inmuebles en arriendo en Medellín han aumentado en un 381% desde 2020, siendo los meses de noviembre y diciembre de 2023 los que registraron un mayor incremento.
En cuanto a la canasta familiar, Medellín supera a Bogotá en precios de productos básicos como arroz, pollo, tomate, papas y naranjas. Comer en un restaurante económico en la ciudad cuesta en promedio $25.000, mientras que en Bogotá el mismo plato ronda los $23.000, una diferencia del 8% y tomarse una cerveza en Medellín cuesta cerca de $7.000, mientras que en Bogotá se puede conseguir por $5.000, es decir, un 28,6% más barata. También, el transporte también presenta diferencias y aunque el pasaje del metro de Medellín es más barato que el de TransMilenio, otros costos como taxis y gasolina son más altos en la capital paisa.
El impacto en la clase media y la proyección de la inflación
El impacto del alto costo de vida se siente especialmente en la clase media, un sector que enfrenta el encarecimiento del arriendo, la canasta básica y otros servicios esenciales. Según datos del DANE, el precio de la vivienda nueva en Medellín aumentó un 10,42% en el último trimestre del año, superando la media nacional del 9,07%. Para los estratos medios, este incremento fue del 13,87%, lo que significa que acceder a vivienda propia se ha vuelto más difícil.