La EPS Sura, una de las aseguradoras más grandes del país, ha informado que la Superintendencia Nacional de Salud, el día de ayer 9 de diciembre, tomó la decisión de negar la solicitud realizada el 28 de mayo para dejar de ser EPS y salir del sistema a través de un desmonte progresivo.
Según el ente de vigilancia, a pesar de la crisis financiera que atraviesa el sector de la salud en el país, Sura no tendría riesgo sistémico y está en condiciones para continuar prestando servicios a sus más de 5,4 millones de afiliados.
“Analizaremos en detalle el contenido de la resolución para dar continuidad a los trámites a que haya lugar según el debido proceso. Y en paralelo, por solicitud de la Superintendencia Nacional de Salud, participaremos en la búsqueda de alternativas en aras de encontrar soluciones”, expresó la EPS en un comunicado enviado a sus afiliados.
La decisión no fue tomada con mucha sorpresa por los expertos, considerando las complicaciones que habría en el país para trasladar pacientes a otras EPS receptoras y mantener la estabilidad en la calidad de los servicios. Sin embargo, hay diversas opiniones acerca de la importancia de mantener activas las tres principales aseguradoras colombianas (Sura, Nueva EPS y Sanitas) para poder implementar a futuro la reforma que hoy empieza su primera discusión en la Plenaria de la Cámara de Representantes.
Básicamente, según algunos expertos como Luis Jorge Hernández, profesor de la Universidad de los Andes, la solicitud fue rechazada porque esto aumentaría la crisis del sistema de salud.
